Cada chico tiene un momento distinto para la erupción de sus dientes, y es normal que esto suceda a los 5, 6 o 7 años. Es recomendable, para que los dientes salgan más fuertes, darle al niño gotas o comprimidos de flúor, según su edad. En realidad muchos médicos comienzan este tratamiento cuando la mamá está embarazada, aunque no se sabe con certeza si el flúor atraviesa la placenta. En otras ocasiones el tratamiento comienza con el bebé. Las gotitas se deben tomar todos los días, durante períodos de dos o tres meses. Está comprobado que el flúor forma una estructura de esmalte más fuerte y resistente a las caries.
