Hay muchos juegos infantiles que desarrollan la destreza física de los niños que además suelen no cansarse de ellos. Corretear, trepar, escabullirse, son motivo de interminable regocijo. Mecerse en un columpio artificial, si es lo que hay a mano, o, lo que es todavía mejor, en los lugares que han descubierto en el bosque o en un parque, es la posibilidad más notoria de liberarse de su posición de estar pegados a la tierra. Los juegos de corridas, de policías y ladrones, cualquier cosa en que entre la emoción y la algarabía de evitar la captura es encantadora en esa época de travesuras de los primeros años de escuela. Si en este momento tienen la posibilidad de jugar al aire libre entre la naturaleza serán realmente felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario