los adolescentes

En general los adolescentes tienen hermanos pequeños y esto debe tenerse muy presente. De su actitud ante los cambios o demandas del adolescente dependerá la de los hermanitos menores cuando crezcan. Las habituales bromas que descolocan a los hermanos mayores se transformarán en admiración. Para el flamante adolescente ser tomado como modelo por sus hermanos será gratificante y colaborará con hacerlo sentir menos torpe.

Son de esperar las conductas contradictorias, como dependencia-independencia, momentos de profundas fantasías con salidas estrepitosas. Estas actitudes fluctuantes lo ayudan a aceptar la pérdida de la infancia. Los ensayos constantes de pérdida y recuperación son pruebas que hace para organizar su nueva realidad. Los padres deben mostrarse comprensivos, pero firmes. Recuerde que éste también es un aprendizaje para toda la familia.

cuidado hijos

Cuando se les permite salir sin su compañía y con un grupo de amigos, a sus hijos de 9 o 10 años no está demás recordarles los cuidados y precauciones que debe tener. Primero que nada debe cuidarse con los juegos de barras paralelas y hamacas, no debe pasar por delante ni por detrás cuando estan en movimiento. No deben juntar cosas que vean tiradas y manipularlas, así como no abrir posibles paquetes. Si se encontraran con algo de esto deberían acercarse al personal de vigilancia de la plaza o avisar a otros padres. Tampoco deberían tomar agua de bebederos es mejor que lleven algo de dinero para comprar una gaseosa o agua mineral

sus hijos

Es cierto que con la aparición de la edad de la adolescencia todo se hace más difícil para los papas poco actualizados. El nene o la nena creció y esto genera ansiedad, pero también se le puede hablar desde otro nivel, más cercano al de un adulto, y esto debe ser aprovechado. Es sumamente favorable el mostrarse orgulloso de los cambios que experimenta su adolescente.

En muchas ocasiones los chicos se sienten culpables por verse grandes, desgarbados e incómodos dentro de su propio cuerpo. La aprobación de los padres será un aspecto fundamental.

dientes de leche

Cada chico tiene un momento distinto para la erupción de sus dientes, y es normal que esto suceda a los 5, 6 o 7 años. Es recomendable, para que los dientes salgan más fuertes, darle al niño gotas o comprimidos de flúor, según su edad. En realidad muchos médicos comienzan este tratamiento cuando la mamá está embarazada, aunque no se sabe con certeza si el flúor atraviesa la placenta. En otras ocasiones el tratamiento comienza con el bebé. Las gotitas se deben tomar todos los días, durante períodos de dos o tres meses. Está comprobado que el flúor forma una estructura de esmalte más fuerte y resistente a las caries.

adolescentes

Cuando una madre ya ha pasado por esa etapa algunos comportamientos adolescentes son normales, por ejemplo su distracción, las contestaciones y la desprolijidad, se pasan escuchando música y pasan poco tiempo en casa, mirando tv o simplemente encerrado en su cuarto. Si por primera vez se tiene a un hijo en esta etapa los cambios en su conducta suelen ser preocupantes. A partir de los 12, los cambios parecen más rápidos y, sin duda, son de lo más variados. Esta situación exige de los padres una actitud alerta. Dialogar con un hijo adolescente, cuando éste tiene 16 años y está en plena rebeldía, será mucho más difícil si antes fue un chico dócil.

El desarrollo biológico exige una nueva organización de su personalidad, pero también del entorno. Es importante que, en este momento, los padres compartan su visión y sus sentimientos al respecto. Hay parejas que pasan a sentir una sensación de deterioro o impotencia. En este instante es fundamental que los padres puedan ayudar al chico a aceptar estas transformaciones, siempre que ellos las hayan aceptado.

familia hijos

Una de las dudas que se presentan a los padres con hijos pequeños, de unos 9 o 10 años. es permitirle o no que salgan a jugar sin el cuidado de un mayor, por ejemplo a la plaza. No está mal dejarlos ir sin usted pero siempre y cuando vaya con amigos y se le haya enseñado a cuidarse. Es cierto que podrían enumerarse muchos riesgos pero si la educación es la correcta y se le enseña a prever ciertos accidentes está bien que salga, dentro de ciertos límites, con un grupo de amigos. Lo que parece primordial a saber es que no debe alejarse del grupo con el que sale, además de no dialogar con extraños ni aceptar regalos de nadie desconocido.

para dormir niños

Es muy difícil convencer a un niño de nueve o diez años de que debe dormir, no se debería insistir demasiado en ellos, es mucha la energía que contienen sus cuerpecitos como para pasar tiempos de ociosidad muy largos. Si se los quiere tener un poco más tranquilos por momentos lo mejor es incentivar en ellos el gusto por la lectura o realizar actividades en las que puedan jugar pensando. Así como dormir será un fastidio, comer será una fiesta. Además de gustarles mucho ciertos alimentos no se detendrán al momento de comer ni para respirar, suelen comer muy rápido, y suele no respetar demasiado los horarios para hacerlo, es que tanto gasto de energía les dará hambre en cualquier momento del día. Es bueno que se acostumbren a sentarse con tranquilidad y compartir la comida con la familia, pero también hay que tener frutas o algo al alcance de su mano para los momentos de apetito fugaz.

niños 9 años

Cuando los niños comienzan a crecer, alrededor de los nueve años, se convierten en grandes coleccionistas. Están atentos de las promociones, juntan tapas, cajas, latas, sellos o figuras, cromos, y guardan todo aquello que para ellos se convierte en un tesoro precioso. Gustan mucho de los juegos de construir, a veces pasan más tiempo con unas cuantas maderas y herramientas que con costosos juegos. Será el tiempo de coleccionar y completar álbumes en donde quedará demostrado lo importante que es la memoria de los niños al recordar simplemente con verla cuál cromo les falta y cual está repetido, este tipo de actividades no debe permitirse que quede relegada por la tecnología. Se pueden combinar ambas cosas pues tampoco hay que evitar su contacto con las nuevas innovaciones que darán una mayor velocidad a otras capacidades.

juegos de mesa

Alrededor de los nueve años se puede aprovechar e incentivar a los niños a que pasen tiempo con los juegos de mesa. En los tiempos que corren este tipo de actividades se ha olvidado y se ha suplantado por la computadora o los juegos de PlayStation, pero no se deben descartar los otros juegos pues se incentivan varios conocimientos y modos de actuar. Además estos juegos no sólo se realizan entre amigos sino que también pueden hacerse en familia. Muchas veces los niños que pasan el tiempo en estos juegos, o que aprenden a jugar a las damas o ajedrez por ejemplo, no entienden el hecho de que la mayoría de las veces los adultos resultarán vencedores, pero luego de asimilado esto se despierta en ellos el verdadero espíritu deportivo en el que saben que se preparan para poder ganar algún día. Realmente se incentiva el compañerismo en estas actividades.

niños adivinanzas

A los nueve años los niños pueden ser atraídos al mundo de las adivinanzas, rompecabezas, acertijos y otros juegos de habilidad, que no sólo son divertidos sino que incentivan ciertas capacidades intelectuales. A esta edad también comienzan a hablar con confienza, incluso se suele decir que hablan de más. Les gustan mucho los chistes y las bromas. Las niñas disfrutan vistiéndose con ropa de la mamá y utilizando sus zapatos altos, van de un lado a otro paseándose con sus cochecitos de bebé, se hacen visitas como si fueran señoras mamás y se cuentan cosas de la escuela o de sus propias casas, además es muy común el juego en el que hacen de maestras, y utilizan en sus juegos a niños más pequeños.