Los hijos desarrollan su propio carácter y hay muchas cosas imposibles de cambiar, tanto en la personalidad individual que les es propia como en la familia misma Es conveniente armar un esquema gráfico con los miembros de la familia que cubra tres generaciones y registrar tanto los nacimientos como los fallecimientos, las bodas o las separaciones.
Así, cuando lo analicemos sabremos muchas cosas, entre ellas, por qué, por ejemplo, nuestra hija siempre va a contarle sus problemas a su tía en lugar de exponerlas ante nosotras. O por qué se justifica que la seriedad inusual de uno de nuestros niños nos preocupe tanto o más que el desinterés de otro por los temas escolares.
En lugar de polemizar todo el tiempo, aceptaremos con naturalidad las diferencias que hay entre nuestros pequeños y detectaremos qué podríamos hacer para ayudar a aquel que extrañamente se está quedando rezagado en su crecimiento interior.
Así, cuando lo analicemos sabremos muchas cosas, entre ellas, por qué, por ejemplo, nuestra hija siempre va a contarle sus problemas a su tía en lugar de exponerlas ante nosotras. O por qué se justifica que la seriedad inusual de uno de nuestros niños nos preocupe tanto o más que el desinterés de otro por los temas escolares.
En lugar de polemizar todo el tiempo, aceptaremos con naturalidad las diferencias que hay entre nuestros pequeños y detectaremos qué podríamos hacer para ayudar a aquel que extrañamente se está quedando rezagado en su crecimiento interior.