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lunes, 11 de julio de 2011

Reglas para dictar a un niño


Finalmente, para dictar, deberías recordar tres reglas básicas:

• El niño no debe escribir como habla, pues de ahí resultan muchas de las faltas de ortografía. Tiene que ir aprendiendo que los sonidos se expresan con letras y que sonidos iguales se pueden escribir de distinta, manera. Tiene que aprender que la palabra hablada «encendedor no se puede reconocer fácilmente: ¿se escribe con C o S?

• Dile siempre a tu hijo cómo se escribe correctamente una palabra, y nunca cómo no se escribe. Así, en su memoria se grabará la manera correcta de escribirla.

• Y no te preocupes si, en el dictado de la escuela, tu hijo escribe mal una palabra que conocía bien en casa. Por un lado, la situación es muy distinta en la escuela, y además, una palabra familiar puede sonar muy extraña en un contexto desconocido. Como ves, puedes serle de gran ayuda a tu hijo. Sólo hace falta poner un poco de imaginación y los progresos serán inmediatos. El que el pequeño perciba que participas con él en el aprendizaje de su vocabulario le servirá de refuerzo y estímulo a la hora de mejorar su ortografía.

jueves, 7 de julio de 2011

Los dictados para los niños


Dictados en cd. El mismo niño se dicta un texto en el grabador; primero texto completo y más tarde en pequeñas unidades. Esta forma de practicar tiene muchas ventajas: el niño tiene que leer previamente, pronunciar con claridad y escuchar atentamente. Además puede elegir él mismo la velocidad de la escritura simplemente parando el cd. En muchos casos suele conseguirse de esta manera aumentar la velocidad de escritura individual, lo cual es importante para los posteriores dictados en el colegio. Muchos niños hace faltas precisamente porque tienen que escribir demasiado rápido.

Dictado con señas. Elige para ello un texto de un libro de cuentos o simplemente palabras del fichero. El texto se lee primero y a continuación se dicta de modo que tu hijo pueda evitar las faltas de ortografía. Para ayudarlo, antes del dictado pueden llegar a un acuerdo sobre como le vas a avisar de los peligros; por ejemplo tosiendo, con una palmada, golpeando la mesa u otra señal cualquiera. En este caso tú eres tan responsable como tu hijo de que el dictado salga sin faltas.

Dictado con diccionario. Díctale a tu hijo una lista de palabras sobre un determinado tema (el hogar: calefacción, ventana, sofá, silla, percha..., etc.). El niño anota las palabras y busca en el diccionario su correcta ortografía. De esta manera, se va acostumbrando a utilizar el material de consulta, y aprende que no hace falta saberlo todo, pero sí saber dónde encontrarlo.


sábado, 2 de julio de 2011

Corregir faltas de ortografía


Existen otras posibilidades. La variedad de juegos idiomáticos encaminado la corrección de faltas ortográficas o apoyo de una defectuosa pronunciación muy amplia. Un ejemplo sería el de formar con las letras de una palabra —o-r-t-o-g-r-a-f-í-a por ejemplo— todas las palabras posibles; por supuesto está permitido el uso del diccionario.

Otro caso es el intentar descubrir nuevas palabras en texto cualquiera, por ejemplo: «nueve lámparas son diez puntos de luz», porque entre ellas hay una vela.

La renovación del dictado. Para muechos profesores el dictado sigue siendo el método preferido para examinar la ortografía de los alumnos. Pero existen maneras de conseguir que los dictados tengan más sentido. En cualquiera de los casos, no se trata de contar las faltas, marcarlas con rojo y anotarlas al final. Más bien hay que intentar que el niño evite esas faltas. Es muy positivo que el alumno aprenda a reconocerlas y corregirlas por sí mismo. Existen diferentes juegos en torno a los dictados que pueden servir de ayuda a los problemas del niño si le damos una ayuda y los realizamos juntos en casa.


martes, 28 de junio de 2011

Faltas de ortografía


El fichero de palabras. Es un excelente sistema que da unos resultados muy positivos, ya que el niño participa muy directamente en la elaboración y mantenimiento de este fichero. Basta una caja de zapatos dividida en tres compartimentos. En el primero se ponen las palabras nuevas, en el segundo las palabras que tu hijo ya conoce, y la última casilla corresponde a las que conoce muy bien.

En la parte delantera de cada ficha se dibuja lo que significa la palabra (por ejemplo un rayo, un zapato, una vaca) y por detrás se escribe la palabra. El pequeño puede ir ampliando el fichero con palabras que vaya conociendo dentro y fuera del colegio, y poco a poco, y si continúa trabajando estará muy completo. Con este fichero el niño puede practicar jugando: construyendo frases sin tener que preocuparse por la ortografía, y de manera pasiva las palabras se irán grabando en su memoria.

viernes, 24 de junio de 2011

La escritura de los niños


A los 9 o 10 años, para nuestros hijos la escuela empieza a ser ya algo muy serio. Reciben sus primeras notas y los resultados de las pruebas les afectan mucho.

Pero Daniel, otra vez has vuelto a escribir burro con «v»; siempre haces la misma falta», o «¡Mónica, ¿cuántas veces tengo que decirte que delante de «b» y «p» se escribe siempre «m» y no «n»? Advertencias o recriminaciones de este tipo suelen ser muy frecuentes cada vez que los padres nos detenemos en el último dictado que nuestro hijo ha hecho en el colegio, o bien cuando repasamos la carta que han escrito a los abuelos.

Nos preocupa su escritura. Es natural que al ver que nuestros hijos tienen cierta dificultad con la ortografía intentemos evitarlo de alguna manera. Queda fuera de dudas que adoptar una postura de recriminaciones o castigos no es en ningún momento lo más adecuado, y más si tenemos en cuenta que son muy variadas las posibilidades, mediante juegos o fichas de palabras, que tienes de ayudar a tu hijo en este terreno. Tu ayuda, como suplemento a la enseñanza recibida en sus clases de lenguaje, puede resultarle muy útil y divertida a la vez.